Functional additives as a tool to improve robustness of European sea bass (Dicentrarchus labrax) juveniles

Abstract

Los alimentos de origen marino se han convertido en una de las principales fuentes de nutrientes para consuno humano, llegando a suponer hasta el 20% del total de proteína de origen animal consumida en el mundo. En 2020, se produjeron un total de 178 millones de toneladas de peso vivo de pescados y mariscos, con un rendimiento económico total de 406 billones de dólares (USD). El 51% de la producción total provino de la pesca extractiva (90.3 millones de toneladas) y el 48% restantes (87.7 millones de toneladas) fueron producidos por el sector acuícola [SOFIA, 2022]. Sin embargo, esta tendencia se va a ver revertida a la larga debido a la rápida expansión y tecnificación del sector acuícola y el estancamiento de la producción extractiva debido al agotamiento de los caladeros [Carvalho y Guillen, 2021]. Desde finales de la década de 1980, la pesca extractiva genera de media anual entre 86 y 90 millones de toneladas de peso vivo. El sector acuícola por el contrario, ha tenido un incremento en la producción del 609% en las últimas 30 décadas, pasando de producir 14.4 millones de toneladas en los 90s a los 87.7 millones actuales [FEAP, 2021; SOFIA, 2022].