Nuevos enfoques diagnósticos y terapéuticos en oncología veterinaria

Abstract

Adoptando nuevos enfoques diagnósticos y nuevas técnicas, como la inmunohistoquímica en Veterinaria, podemos llegar al diagnóstico de nuevas patologías no descritas hasta el momento y, por tanto, no incluidas en los diagnósticos diferenciales. Esto tendrá un impacto fundamental en el tratamiento y en el pronóstico. De esta manera, llegamos al diagnóstico de un leiomiosarcoma uretral, tumor no descrito en la literatura veterinaria hasta el momento. Estos tumores pueden crecer hacia la vagina y vestíbulo vaginal, por lo que deberían ser considerados en el diagnóstico diferencial de los tumores vaginales y de la vulva, con un impacto importante en el tratamiento y su pronóstico. El uso de nuevos fármacos o de la forma de aplicarlos puede ser de gran utilidad en el tratamiento de algunas patologías y de determinados pacientes. Estos nuevos abordajes terapéuticos pueden ofrecer mejoras de los tiempos de supervivencia y, sobre todo, de la calidad de vida del paciente. En nuestro trabajo evaluamos la eficacia de un esteroide inyectable en forma depot dentro de un protocolo CHOP y éste parece proporcionar una supervivencia más larga en pacientes felinos con linfoma mediastínico. En otras ocasiones, un abordaje terapéutico que incluya una prevención de los efectos secundarios en el paciente nos ayudará a que los propietarios acepten en mejor grado los tratamientos oncológicos y a que las mascotas tengan una mayor calidad de vida y un óptimo bienestar animal. En nuestro estudio, la combinación de maropitant y loperamida fue segura para los pacientes con cáncer, sin efectos tóxicos de relevancia clínica que requirieran intervención veterinaria. Esta combinación de medicamentos fue muy efectiva a la hora de reducir o prevenir los efectos secundarios gastrointestinales del paclitaxel en perros con cáncer. A los veterinarios clínicos se nos solicita nuestra recomendación para guiar a los propietarios de las mascotas en la toma de decisiones basadas en la evidencia en materia de esterilización de las mascotas. La decisión de esterilizar o no debería ser tomada de forma individual y tener en cuenta una serie de factores entre los que se incluye el riesgo de contraer cáncer.