Gastrectomía vertical y reflujo gastroesofágico, 20 años después

Abstract

La gastrectomía vertical (GV), entró en el arsenal terapéutico del cirujano bariátrico por la puerta grande. Se trataba de una técnica quirúrgica aparentemente sencilla y segura, reproducible, y que no afectaba a la absorción intestinal. Todo esto facilitaba su aplicación en casi cualquier tipo de paciente, con patologías asociadas metabólicas o cardiovasculares de riesgo, mujeres con posibles embarazos futuros, adolescentes, o grandes obesidades como un primer paso, etc. Además, facilitaba el desarrollo de la cirugía bariátrica en centros nóveles, por la supuesta simplicidad del procedimiento.

Vertical gastrectomy (VG) entered the therapeutic arsenal of bariatric surgeons with a bang. This surgical technique was apparently simple and safe, reproducible, and did not affect intestinal absorption. This encouraged its use as an initial step for almost all patient types, including those with associated high-risk metabolic or cardiovascular diseases, women with possible future pregnancies, adolescents, or the morbidly obese. It also facilitated the performance of bariatric surgery in additional types of centers, given the apparent simplicity of the procedure.